La mayoría de nosotros hacemos ejercicio con el objetivo de mantenernos en buena forma física. Los beneficios del ejercicio físico sobre la salud están más que demostrados, pero lo que muchos no saben es que la salud psicológica es una de las más beneficiadas.
Y es que practicar ejercicio de forma regular y llevar una vida activa tiene incontables beneficios para el cuerpo y para la mente. Descúbrelos todos en este post.
1. Hacer ejercicio te hace feliz
Sí, sí. Como lo lees. Al hacer ejercicio segregamos endorfina, que es la hormona de la felicidad. Esto es lo que hace que cuando hacemos ejercicio nos sintamos felices y que el ejercicio ‘enganche’. Es decir, que queramos repetir.
Además, las endorfinas también nos ayudan a regular y controlar problemas como la ansiedad y el estrés, tan habituales en estos tiempos, lo que nos hace sentirnos bien y dormir mejor. Y es que cuando generamos endorfinas la sensación de felicidad y bienestar que nos envuelve nos hace olvidarnos de nuestros problemas y relajarnos, lo que hace disminuir de forma directa la ansiedad y el estrés.
2. Hacer ejercicio genera autoestima
Las personas que hacen ejercicio de forma regular tienen una mejor concepción de ellas mismas que las que llevan una vida sedentaria, como han demostrado varios estudios.
Llevar una vida activa y hacer ejercicio de forma regular nos hace sentir mejor con nosotros mismos, porque somos conscientes de que nos estamos cuidando y que ello repercutirá en nuestra salud y en nuestro aspecto. Es lógico que cuando hacemos algo que nos hace sentir bien con nosotros mismos e incluso orgullosos, nuestra autoestima y la propiocepción mejoren de forma inmediata.
Además, el deporte y el ejercicio físico plantea retos constantes y exige de tu esfuerzo para superarlos y mejorar tus marcas y objetivos día a día. Y no hay mejor chute de autoestima que ir superando estos retos con tu esfuerzo personal.
Esta mejora de la autoestima viene también derivada de la sensación de control y autocontrol que nos provoca la práctica de ejercicio.
3. Hacer ejercicio mejora el aprendizaje, la concentración y la memoria
Ya lo decían los romanos, ‘mens sana in corpore sano’. La actividad física tiene increíbles beneficios directos para el cerebro. Al hacer ejercicio estimulamos el hipocampo, que es la zona del cerebro vinculada a la memoria y la concentración. Está demostrado que los trabajadores que practican ejercicio consiguen mejores tasas de rendimiento con menores niveles de estrés.
Además, se aceleran la producción de neuronas y las conexiones neuronales, lo que incrementa la capacidad cerebral para el aprendizaje, fundamental sobre todo en la infancia. Este es uno de los motivos por los que es tan importante que los niños se acostumbren a hacer ejercicio lo antes posible, en vez de llevar una vida sedentaria.
4. Hacer ejercicio previene el deterioro cognitivo
Hay varios estudios que señalan que mantener al cerebro ocupado previene la aparición de enfermedades degenerativas vinculadas al funcionamiento cerebral. Como todos los órganos, el cerebro tiende a atrofiarse si no lo utilizamos, lo que nos hace perder capacidad cognitiva y puede provocar algunos trastornos. Como hemos explicado antes, cuando hacemos ejercicio estamos estimulando el cerebro y haciéndolo trabajar, aunque no nos demos cuenta de ello.
Las personas que llevan una vida activa consiguen retrasar los signos y problemas de salud vinculados al envejecimiento a todos los niveles, tanto desde el punto de vista físico como cognitivo.
5. Hacer ejercicio mejora las relaciones sociales
La actividad física facilita las relaciones sociales por distintos motivos. Por un lado, en los deportes de grupo e incluso en las clases comunitarias se genera una sensación de solidaridad y trabajo en equipo que promueve que se generen sentimientos de amistad y apego hacia las personas con las que compartimos la actividad.
Por otro lado, como hemos mencionado antes, hacer ejercicio de forma regular mejora nuestra propiocepción y nuestra autoestima, lo que nos ayuda a vencer posibles inseguridades a la hora de acercarnos a los demás y establecer relaciones sociales de todo tipo con ellos.
¿Conocías todos estos beneficios psicológicos del ejercicio físico? ¿Cuál crees que es el más importante?
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